Adiós del iniciado

…l´amor che move il sole e l´altre
stelle.

Dante

En soledad me hundo, me oscurezco,
rey de mi soledad y de mis siglos.
Unos labios sagrados me succionan
y respiro la brisa de las almas.

Buenas noches, adiós al laberinto
que dibujan las venas de las hojas.
En el árbol del ser importan poco
las hojas fugitivas del estar.

Me inmovilizo en sombras como cunas.
Me desmemorio como un mar sin peces.
Paraíso, por fin: lo doble y uno.

Pero si llega el tiempo de la ira,
volveré de la mano de la diosa
que hace mover la luna y las estrellas.